El editor y el seguimiento de la obra

En entradas anteriores vimos como se plantea la producción de una obra desde el momento en el que se piensa el original, se habla con el autor y se firma un contrato. En este caso, apuntaremos al capítulo 3 del libro Gestión de proyectos editoriales. Cómo encargar y contratar libros de Gill Davies, donde se aborda el tema del seguimiento del trabajo del autor.

El editor es quién acompaña al autor durante el proceso de escritura, no solo controlandolo, sino que también apoyándolo en su tarea. Debe, por lo tanto, tener un control y llevar un calendario con los procesos que tendrá que afrontar el original antes de llegar a la imprenta, donde uno de los puntos importantes es fijar la fecha de entrega. Entonces, el editor deberá hablar con el autor en diferentes ocasiones para asegurarse del estado de escritura del libro y así poder prevenir los posibles retrasos, ya que afrontarlos significará una reprogramación de todo el plan y un posible atraso en la fecha de publicación del libro.

Para que ambas partes puedan estar cómodas con el proceso, se aconseja plantear un sistema de seguimiento del trabajo del autor, en el, el editor podrá describir cómo desea que se desarrolle y podrá comunicarle al autor que se pondrá en contacto con el periódicamente. Es importante que este seguimiento no sea molesto para el autor, por ejemplo si la fecha de entrega está pensada en doce meses, Davies aconseja que se tome contacto cada dos meses. Durante este tiempo el editor debe tener en cuenta que el autor necesita que se lo aliente y se lo estimule para facilitarle el proceso de escritura y calmar su ansiedad, considerando que hay diferentes tipos de autores, algunos más independientes y otros que dependerán del contacto constante con el editor.

Otro aspecto importante del trabajo del editor es aprender a lidiar con los posibles conflictos como pueden ser las disputas entre coautores o integrantes de un equipo de autores, o discusiones que se pueden dar también entre el editor y el autor, el bloqueo del autor o bien tener que lidiar con un material que no se ajuste a lo esperado.

Si una vez hecha la entrega el Editor se encuentra con que el original se desvía de la propuesta que se planteó en un principio puede optar por rechazar el libro o darle otro enfoque a la propuesta, esto dependiendo del cambio que pueda ocasionar financieramente al plan.

El trabajo del editor es, como vimos, inherente a todas las áreas correspondientes a la producción del libro, teniendo que estar atento a cada uno de los detalles y previendo los posibles contratiempos que puedan llegar a aparecer.